viernes, 5 de mayo de 2017

SILENCIO.


          Tarde lenta e impaciente. En el anaquel, libro curioso.

     " Sonreír al sufrimiento puede parecer excesivo. Pero lo cierto es que también la tristeza y la desgracia están ahí para nuestro crecimiento. El mal debe aceptarse, lo que significa ser capaces de ver su lado bueno y, en definitiva, agradecerlo. Sabemos que hemos aceptado un sufrimiento cuando hemos extraído algún bien de él y, en consecuencia, hemos dado las gracias  por haberlo padecido. No estoy diciendo que sonreír ante la adversidad sea lo más espontáneo; pero es sin duda lo más inteligente y sensato. Y diré por qué. Reaccionar ante el dolor con animadversión es la manera de convertirlo en sufrimiento. Sonreír ante él, en cambio, es la forma de neutralizar su veneno. Nadie va a discutir que el dolor resulta desagradable, pero aceptar lo desagradable y entregarse a ello sin resistencia es el modo para que resulte menos desagradable. Lo que nos hace sufrir son nuestras resistencias a la realidad "

               Pablo d´Ors.

               ( Foto de Ferdinando Scianna )



2 comentarios:

El lejano dijo...

"puede pareceR excesivo."

¿Cuál es el título del libro de Pablo d'Ors?

(el día 3 de mayo te dejé un comentario que no has visto).

José María. dijo...

" Biografía del silencio "